



Bueno, fue rápido... la verdad. Espero que lo disfruten.
Nombre: ¿De dónde vienen los bebés?
Autora: Uebo Hime :3
Pareja: Sexy Zone / Capitulo 2:FuMarius
Formato: Mini drabble ( 414 palabras)
¿DE DÓNDE VIENEN LOS BEBÉS?
I {FuMarius}
—
Fuma-san —rió empujándolo mientras este tomaba café haciendo que el líquido
cayera. El mayor puso cara de enfado, fingiendo, ya que sabía que no había sido
adrede.
—
Prepárate para correr… ¡porque te voy a matar! —le dijo acechándolo.
—
¡¡Ah!! —gritó el menor y comenzó a correr seguido de un “furioso” pero
divertido Fuma.
—
Corre~ No te dejaré con vida pequeñín —le dijo entre risas justo antes de
atraparlo entre sus brazos. El mayor era mucho más veloz.
— ¡Ah! —chilló
el pequeño intentando separarse pero un ataque de cosquillas arribó en su panza—
N--no F--uma-kun —rió pataleando.
— Te lo
mereces por tirador de cafés —dijo entre risas el pelinegro.
—
¡Basta Fuma-kun! —rió nuevamente el pequeño.
—
Nunca~ —canturreó el más grande.
—
Fuma-kun… ¿de dónde vienen los bebés? —le preguntó y el otro acalló su risa y
dejó las cosquillas.
— ¿Qué?
—parecía no entender.
— ¿Debo
repetirlo? —le dijo en respuesta.
— N--no
¡No! —casi gritó— ¿Kento? ¡Kento! ¿Dónde está Kento? —dijo desesperado.
— Acaba
de irse a casa… ¿no me dirás? —insistió el rubio.
—
¡Kento! Kento… ¿qué hago? —buscó su celular en su bolsillo derecho y marcó 1,
el número en donde tenía a su novio en marcación rápida— ¡Kento! ¡Vamos!
¡Atiende! —nada. La llamada no era contestada. Colgó— Bien… creo que es hora de
que tú y yo tengamos una conversación de hombre a niño… —dijo y soltó un
suspiro. El menor asintió ante sus palabras— Verás… tu mamá y tu papá… al igual
que mi madre y mi padre… hicieron cosas de grandes, que son placenteras, pero
dolorosas y hemos nacido de ahí nosotros… —dijo.
— Um…
¿comieron mucho chocolate? —indagó el más chico.
— ¿Ah? —no
entendió el mayor a qué se refería el pequeño.
—
Cuando como chocolate se siente muy placentero… ¡pero luego me duele el
estómago todo el día! —se explicó.
— Ay…
kawaii —rió— No es eso Mari-chan… Tu madre fue pen-- —se interrumpió
mordiéndose la lengua— ¿Dónde está Kento cuando lo necesito? —casi gritó
asustando al más chico— Lo siento... Tu madre gritó mucho porque tu padre le hizo
cosas deliciosas que le dolían pero le encantaban…
— ¡Ah!
¡Ya sé qué le hizo! —gritó el menor feliz.
— ¿Si? —el
mayor se mordió el labio.
— ¡Sí!
Le preparó salmón con salsa de coco y wasabi para la cena… ¡Mamá ama eso! Pero
luego le dan retorcijones… —hizo una mueca.
—
¿Mari-chan?...
— ¿Si? —lo
miró.
— Mejor
habla con Kento… —suspiró y salió corriendo lo más rápido que sus piernas le
permitieron.
Mari
sonrió.